No cabe duda que Madrid está lleno de secretos (para muestra, un botón) y el ámbito gastronómico no iba a ser una excepción.
En Secretos de Madrid hemos hablado con cierta frecuencia sobre restaurantes y todo tipo de ofertas gastronómicas interesantes para nuestros lectores, pero en esta ocasión queríamos centrarnos en algunos emplazamientos especialmente diferentes, o que guardan alguna peculiar que les hace destacar sobre otros restaurantes.
Pues bien, empecemos por un establecimiento escondido a plena vista, en la Plaza Mayor de nuestra ciudad: Arrabal Madrid. No se trata simplemente de un restaurante para eventos situado en uno de los mejores enclaves de la capital, sino que, al adentrarnos en su interior, nos encontraremos con un maravilloso y amplio salón, ¡dentro de una cueva subterránea! Su imponente cueva convierte a Arrabal en un lugar único y muy diferente que, por supuesto, va acompañado de un excelente servicio y una exquisita gastronomía.
Viajamos al mundo del juego y el glamur en nuestro siguiente destino, y es que los casinos online están tan de moda que son pocos los que, a estas alturas, no han hecho sus pinitos virtuales. Gracias a plataformas que ofrecen bonos de reembolso en casinos, permitiendo recuperar parte de lo invertido en una apuesta, a la seguridad que han adquirido estas webs y apps de juego, y a la comodidad de jugar desde cualquier lugar a través de nuestros dispositivos móviles, se trata de uno de los sectores con más crecimiento durante los últimos años. Pues bien, seas o no un jugador digital avezado, te recomendamos encarecidamente que te pases por el Casino de Madrid, uno de los más espectaculares de Europa, y, de paso que pruebas la experiencia de juego presencial, te acerques a Paco Roncero Restaurante. Algunos ya lo conoceréis por otro nombre: La Terraza del Casino, y se trata, probablemente, de uno de los mejores emplazamientos que acoge a un restaurante en nuestra ciudad: está situado en la parte superior del casino y, desde su espectacular terraza, podrás disfrutar de una de las mejores vistas de Madrid; amén, por supuesto, de una de las mejores ofertas gastronómicas del país.
No podíamos escribir un artículo como este y no mencionar a Quintoelemento, el nombre que ha recibido la nueva aventura empresarial del Grupo Kapital. Aunque seréis muchos los que conocéis a estos emprendedores por el ocio nocturno, hace unos meses se lanzaron al mundo de la gastronomía y han cosechado excelentes críticas. Su restaurante ofrece todo un viaje a través de los sentidos, desde la carta y la decoración con materiales nobles, hasta una sorprendente experiencia audiovisual que caracteriza a todo el espacio y ha sido uno de los aspectos más destacados por críticos profesionales y de a pie. Detrás de los platos que degustaremos se encuentra el chef Juan Suárez Lezo, quien ha desarrollado una carta con mucha personalidad, influencia cosmopolita y, fundamentalmente, basada en productos de altísima calidad. Probablemente, los toques latinos y asiáticos destacan en lo que respecta a su oferta culinaria, aunque la base de sus platos está, como no podía ser de otra forma, en el Mediterráneo.
Aunque se van a quedar muchas alternativas en el tintero, no queríamos despedirnos sin recomendar uno de nuestros lugares favoritos: El Jardín de Arzabal, en el interior del Museo Reina Sofía. Al igual que ocurre con Paco Roncero y el Casino de Madrid, en este caso podemos disfrutar de uno de los museos más importantes de Europa a un tarifas muy asequible, y luego deleitarnos gastronómicamente. El restaurante se ubica, de nuevo, en uno de los espacios más increíbles de nuestra ciudad, y destaca especialmente por su cenador acristalado, repleto de naturaleza. Además de ofrecer algunos de los mejores platos de nuestra cocina tradicional (y de los bares de tapas que se caracterizan por la concina mediterránea), El Jardín de Arzábal ofrece un emplazamiento incomparable dividido en dos zonas: un salón interior, con reservado, y una zona exterior que emula un jardín, donde está el cenador del que hablábamos, una terraza al aire libre y hasta una barra exterior.
Como decíamos, podríamos seguir así hasta el agotamiento, la oferta alternativa madrileña es prácticamente inagotable, pero hemos querido detenernos en algunas de nuestras alternativas predilectas, para aquellos que disfrutáis de la gastronomía y queréis vivir una experiencia distinta.
