Aunque en la actualidad nos cueste creerlo, con las constantes señales de alarma y precaución que nos advierten sobre la polución y alto nivel de contaminación del aire de Madrid, hubo un tiempo en el que el aire de la Villa era de lo más saludable y recomendable, tanto que nos dejó curiosas imágenes como la que miramos hoy.
Para ubicarnos en el espacio y en el tiempo toca decir que nos encontramos en el desaparecido Hospital de San Rafael a inicios del Siglo XX. Este centro sanitario, que en un primer momento se levantó en el Paseo de las Acacias, se ubicaba muy cerquita del actual Estadio Santiago Bernabéu, en la manzana que conformaban las calles de Concha Espina, Paseo de la Habana y Serrano, el presupuesto de sus obras de construcción ascendió a 600.000 pesetas y en él llegó a haber hasta 120 camas. En ellas se atendían a niños raquíticos, lisiados, con parálisis y otro tipo de enfermedades.
Aunque en la actualidad, en la Calle Serrano, sigue habiendo un Hospital de San Rafael, prácticamente nada queda de aquella enorme edificación de estilo mudéjar que nos regaló la peculiar mirada que hoy miramos con cierto asombro. Gracias a este documento vemos como los niños, con sus respectivas camas, eran sacados a las galerías exteriores para que ahí pasasen las horas, respirando el aire puro y fresco que llegaba procedente de la Sierra. Un tratamiento económico y aparentemente eficaz que en la actualidad, un siglo más tarde, sería un despropósito, especialmente en esas fechas en los que el ambiente de Madrid es, por desgracia, irrespirable.
Esta valiosa fotografía y muchas más sobre el pasado y presente de Chamartín las podéis encontrar en este recomendable libro.