Si caminas por Hortaleza, en la esquina con la calle Santa Brígida, vas a encontrar esculpida en el suelo una simpática tortuga. ¿El motivo? Lo tienes justo al lado, en la fuente que ocupa el chaflan del edificio. Resulta que anteriormente, aquí se ubicó una fuente diseñada por el gran Ventura Rodríguez, en el año 1772 y que contaba en su diseño con dos grandes galápagos, por eso la gente la conocía como la Fuente de los Galápagos. Pero hacia el año 1900, se modificó el diseño de esta por uno más pequeño, ya que los vecinos de la zona decían que la fuente dificultaba el tránsito y giro en este lugar de los carruajes.
Dicho y hecho, se cambió el diseño de la fuente y en ella se colocaron dos peces, perdiéndose para siempre nuestros queridos galápagos, animales que se ha querido recordar y homenajear colocando esa adorable tortuga en el suelo.
Antes de terminar, dos apuntes curiosos, si os fijáis, los números romanos que se ven en la parte superior siguen haciendo referencia a 1772, año de construcción de la fuente original por parte de Ventura Rodríguez. Cuando no existía el agua corriente, esta fuente llegó a tener asignados hasta 24 aguadores que recogían el agua en ella y la suministraban a los vecinos y negocios de la zona.
¡Espero que os haya gustado este curioso secreto de Madrid! Si ha sido así compartidlo con vuestra gente!
